La joyería bereber, procedente del pueblo del mismo nombre que constituye la población originaria del norte de África, es enormemente hermosa. Durante siglos e incluso milenios, las mujeres amazigh han empleado para sus ocasiones rituales y celebraciones de boda o festividades una gran cantidad de collares, diademas, anillos y pulseras que resultan verdaderamente originales y no se pueden encontrar en ninguna parte del mundo. En los últimos años, con la progresiva urbanización y modernización de los Estados del norte de África, muchas de estas joyas que formaban parte del ajuar y se transmitían de madres a hijas se han ido perdiendo, al ritmo que lo hacían los artesanos que las fabricaban. Una gran parte de ellos, judíos, emigraron en su momento a Israel y se llevaron con ellos técnicas de trabajo del metal que se perdieron para siempre. Hoy en día, uno de los mayores placeres que podéis encontrar si viajáis por ejemplo a Marruecos es recorrer sus zocos y bazares en busca de estas piezas realmente únicas.
Si algo convierte a la joyería bereber en excepcional, aparte del hecho evidente de que está realizada enteramente a mano y por tanto estamos ante piezas únicas, es su enorme carga simbólica. Puesto que estamos ante un pueblo antiquísimo, durante milenios los bereberes han ido desarrollando una gran cantidad de significados que se plasman en figuras que han mantenido su relevancia incluso siglos después de dominio árabe. Es el caso, por ejemplo, de la figura del hombre libre, que vemos repetida en sus banderas, o de las cruces, que surgieron del contacto con las poblaciones cristianas del Magreb y que se siguen manteniendo aun cuando esta zona es eminentemente musulmana.
Muchos de los símbolos que vemos en la joyería bereber aparecen, de hecho, repetidos en los tatuajes rituales que las mujeres bereberes de mayor edad siguen pintándose hoy en día. Además, los diferentes tipos de símbolos son identificativos de las tribus a las que pertenecen, por lo que tienen un valor antropológico incuestionable. A ello se suma su enorme belleza, que las convierte asimismo en piezas de tendencia, perfectas para combinar tanto con tus estilismos cotidianos como para aportar un plus de elegancia cuando la ocasión así lo requiera. Si tienes la oportunidad, no dudes en hacerte con unos pendientes, collar o anillos con pura esencia bereber.